Los molinos de viento se han detenido, se avecinan mareas oscuras. Los gritos resuenan ante la oleada de infectados. ¡Usa trampas y conténlos!

-El Vasto Mundo Abierto-
De la montaña nevada a la playa, del bosque al desierto, del pantano a la ciudad… El vasto Mundo del Juicio Final está lleno de crisis, pero ofrece infinitas posibilidades. Aquí, necesitas buscar recursos, construir infraestructura, defenderte de las invasiones zombi y construir tu propio refugio.

-Mantén la Esperanza-
Cuando llegó el día del juicio final, los zombis se apoderaron del mundo, derrumbando el orden social y convirtiendo el mundo familiar en irreconocible. Con los zombis ansiando asentamientos humanos, el clima severo y la escasez de recursos, es difícil sobrevivir. En los mares del Juicio Final, residen nuevos infectados aún más peligrosos y colosales criaturas mutantes capaces de hundir barcos sin esfuerzo…
El peligro acecha por todas partes. ¡Debes mantener la calma y sobrevivir cueste lo que cueste!

Haz amigos supervivientes. Encontrarás a otros supervivientes durante tu exploración apocalíptica.
Quizás estés cansado del llanto zombi y el aullido del viento nocturno cuando viajas solo. Intenta abrirte, compartir el pan con amigos, charlar toda la noche y, poco a poco, crear juntos un refugio tranquilo.

Experimenta la supervivencia semizombi.
La organización Dawn Break afirma que, tras ser mordido por un zombi, un humano aún tiene una oportunidad: vivir como un “Renacido”, abandonar su identidad, apariencia y habilidades humanas, y cambiar para siempre.
Suena arriesgado, pero ¿qué elegirías si se trata de una cuestión de vida o muerte?